¿Sabías que si consumes mollejas de pollo tienes que tomar la decisión de incluirlas en tu dieta por su asombroso valor nutricional? En muchas culturas, las mollejas de pollo son consideradas una verdadera delicia culinaria, apreciadas por su peculiar sabor y textura. Sin embargo, a medida que las tendencias alimentarias han evolucionado, muchas personas han dejado de lado este ingrediente nutritivo, a pesar de que puede ser una adición valiosa a una dieta equilibrada.
Las mollejas de pollo son vísceras que provienen del sistema digestivo del ave. Actúan como un molinillo que tritura los alimentos, ayudando a la digestión. Este artículo va a explorar las ventajas de incorporar mollejas de pollo a tu alimentación, desde su contenido nutricional hasta deliciosas recetas que puedes probar en casa.

A pesar de su imagen menospreciada en la cocina moderna, las mollejas de pollo son una excelente fuente de nutrientes que no deberías ignorar. Desde su alto contenido en proteínas hasta sus minerales esenciales, las mollejas son una opción sabrosa y económica que merece ser redescubierta. A continuación, vamos a detallar los principales beneficios de este alimento y por qué deberías considerarlas en tu dieta.
¿Qué son las mollejas de pollo?
Las mollejas de pollo forman parte del sistema digestivo de las aves y se utilizan para triturar los alimentos antes de que lleguen a los intestinos. Se trata de músculos densos y fibrosos que, cuando se cocinan adecuadamente, ofrecen una textura firme y un sabor intenso. Este corte de carne es una opción popular en muchas cocinas del mundo, desde guisos hasta para asar a la parrilla.
Principales beneficios de las mollejas de pollo
1. Ricas en proteínas de alta calidad
Las mollejas de pollo son una fuente excepcional de proteínas completas, lo que significa que contienen todos los aminoácidos esenciales necesarios para la salud humana. Una porción de 100 gramos de mollejas cocidas proporciona entre 17 y 20 gramos de proteínas, lo que es notable para su pequeño tamaño. Las proteínas son esenciales para la reparación de tejidos, el mantenimiento de la masa muscular y el fortalecimiento del sistema inmunológico.
2. Bajas en grasa y calorías
A diferencia de otras vísceras, las mollejas de pollo tienen un bajo contenido de grasa, especialmente si se cocinan de manera saludable, como al vapor o cocidas. Esto las convierte en un ingrediente ideal para quienes buscan controlar su ingesta calórica y disfrutar de una comida nutritiva sin excesos.
3. Fuente importante de hierro
Las mollejas son ricas en hierro hemo, un tipo de hierro que el cuerpo humano absorbe más fácilmente que el hierro de fuentes vegetales. Consumir alimentos ricos en hierro es fundamental para prevenir la anemia y mejorar el transporte de oxígeno en la sangre, lo que contribuye a combatir la fatiga y el cansancio crónico.
4. Aportan zinc, fósforo y magnesio
Estos minerales son cruciales para diversas funciones del organismo. El zinc es vital para un sistema inmunológico fuerte y la cicatrización de heridas, mientras que el fósforo contribuye a la salud ósea y energética. Además, el magnesio está involucrado en más de 300 procesos bioquímicos, incluyendo la regulación de la presión arterial y la síntesis de proteínas.
Cómo preparar mollejas de pollo en casa
Incluir mollejas de pollo en tu dieta es bastante fácil y delicioso. A continuación, te ofrezco un par de recetas sencillas que puedes probar:
1. Mollejas de Pollo al Ajillo
Ingredientes:
- 500 gramos de mollejas de pollo
- 3 dientes de ajo, picados
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
- Perejil fresco para decorar
Preparación: En una sartén, calienta el aceite de oliva y añade el ajo picado. Cocina hasta que esté dorado. Agrega las mollejas de pollo y cocina hasta que estén bien doradas y crujientes. Sazona con sal y pimienta, decora con perejil fresco y sirve caliente.
2. Sopa de Mollejas de Pollo
Ingredientes:
- 500 gramos de mollejas de pollo
- 1 cebolla, picada
- 2 zanahorias, en rodajas
- 2 ramas de apio, en cubos
- 1 litro de caldo de pollo
- Sal y pimienta al gusto
Preparación: En una olla grande, sofríe la cebolla, las zanahorias y el apio. Agrega las mollejas de pollo y el caldo de pollo. Cocina a fuego lento hasta que las mollejas estén tiernas. Sazona al gusto y disfruta de una sopa reconfortante.